top of page

Géminis de Sol o Ascendente, lo que no se dio, lo que se bloqueó… y lo que ahora sí puede pasar, a nivel profesional y personal.



Geminis de Sol y Ascendente

¿Has sentido que estos últimos meses estuviste con la mente a mil, con ganas de comerte el mundo, pero las cosas simplemente no fluían? Como si todo estuviera listo, pero algo —difuso, confuso, invisible— te estuviera frenando. Bueno, si eres Géminis de Sol o Ascendente, esto no fue casualidad. Fue parte de un proceso astrológico que ahora empieza a moverse, y lo vas a sentir.


Vamos por partes, porque aquí hay varias capas que vale la pena entender bien.


Júpiter en Géminis: las ganas no faltaron


Durante este último tiempo, Júpiter te activó muchísimo. Fue como un subidón de energía mental, emocional y creativa. Empezaste a tener muchas ideas nuevas, te entraste en proyectos, surgieron conexiones, oportunidades, hasta ganas de viajar o expandirte. Pero… ¿por qué entonces sentías que no se concretaba nada? ¿Por qué todo quedaba en veremos, o había que esperar, o el entusiasmo se caía al poco tiempo?


Saturno en Piscis: el freno en seco

La respuesta estaba en otro lado del cielo: Saturno en cuadratura a tu Sol o a tu Ascendente desde Piscis. Mientras Júpiter te impulsaba a moverte, Saturno te pedía estructura, orden, madurez. Pero el problema era que las circunstancias externas no te dejaban avanzar.


Y si eres Ascendente Géminis, esto fue aún más evidente. Porque ese Saturno estuvo transitando tu casa 10, que es la zona de la carta que habla de tu proyección pública, tu profesión, tu estatus, tus decisiones importantes y visibles. Es decir: el mundo externo no estaba disponible para que tú lo ocuparas como querías.

Puede que hayas tenido trabas laborales, cambios en jefaturas, procesos largos, decisiones que no dependían de ti o simplemente el clásico “quiero avanzar pero no sé por dónde”. Todo eso es muy típico cuando Saturno toca esa zona. Las cosas se ponen más lentas, porque te están pidiendo profundidad y compromiso real.


Neptuno también estuvo ahí: confusión e idealización

Y como si no fuera suficiente, durante todos estos años Neptuno también ha estado en tu casa 10. Y Neptuno aquí tiene una jugada muy sutil: puedes haber idealizado un rol, un trabajo, una meta.

Tal vez seguiste caminos por intuición o por lo que “creías” que iba a pasar, sin tener datos claros. Puede que hayas tenido ganas de servir, ayudar o fusionarte con algo más grande… pero todo eso te dejaba con dudas sobre quién eres tú en tu rol profesional. Y ahora, por fin, ese Neptuno empieza a salir de esa casa. Empiezas a ver con más claridad. Empiezas a preguntarte: ¿realmente quiero esto? ¿O era solo una fantasía, un espejismo?


Y lo que viene: eclipses en el eje 10–4

Y aquí viene otra parte importante de todo esto.Los próximos eclipses estarán activando el eje 10–4 en tu carta: lo profesional vs. lo personal. Lo público vs. lo íntimo. La carrera vs. la base emocional.

Este eje no solo marca decisiones laborales o de estatus. También habla de mudanzas, cambios en la familia, temas con la figura materna o paterna, o incluso momentos donde tienes que redefinir desde dónde estás construyendo tu vida.


Si hace tiempo sientes que lo que haces “afuera” ya no se alinea con lo que sientes “adentro”… estos eclipses van a ser puntos de giro.Cambios de dirección. Cierres y comienzos. Decisiones que te van a mostrar qué sí vale la pena sostener, y qué ya no encaja.


La casa 10 se activa con el eclipse en Piscis, junto al Nodo Norte. Y esto no es cualquier cosa. Tu dirección profesional, tu estatus, tu imagen pública, tu rol social… están mutando. Y no solo eso: el Nodo Norte acá te empuja a crecer hacia lo desconocido, hacia lo que todavía no tienes claro, pero que está alineado con tu evolución.


Y lo loco de esto es que no te va a dar respuestas racionales. Este no es un eclipse que te dice “haz esto, gana más, asciende aquí”. Te está llevando por el camino de la intuición, la sensibilidad y la fe en lo que no puedes controlar. Te está pidiendo confiar en algo más grande, sin tener el mapa completo.


Puede manifestarse como:

  • Sensación de que ya no puedes forzar más tu antiguo rol profesional.

  • Una oferta que no estabas buscando, pero resuena con lo que sí quieres.

  • El final de una etapa laboral que se sentía “segura” pero vacía.

  • Ganas de emprender algo más alineado a tu propósito, aunque sea incierto.


Y aquí se suma lo que ya venías sintiendo con Saturno y Neptuno en la casa 10: años donde tu imagen pública fue un área confusa, pesada, cambiante. Ahora los eclipses van a acelerar ese final de ciclo. Lo que se va, se va. Y lo que viene, exige coraje para construir desde otra identidad.




¿Qué hacer con toda esta info?

  1. Sé paciente contigo. Si sentiste bloqueo, no fue tu culpa. Fue un tránsito que te enseñó a madurar tus metas.

  2. No te apresures aún, pero prepárate. Lo que viene necesita más claridad, pero las oportunidades empiezan a mostrarse.

  3. Atiende los cambios en tu entorno. Lo que se mueve en tu hogar, tu base, tu estabilidad emocional… también es parte de la historia profesional que estás escribiendo.

  4. Hazte preguntas reales: ¿Dónde quieres estar? ¿Qué versión de ti se está preparando para salir al mundo con más fuerza?



    Este es uno de esos momentos en que vale la pena parar y mirar todo el recorrido que hiciste, aunque sientas que “no pasó nada”. Porque sí pasó: te estás construyendo por dentro para poder sostener lo que viene afuera.


    Sabes que apenas las puertas se abran… vas a correr a mil por hora. Pero esta vez, con dirección.


CURSO DE ASTROLOGIA

Aprende astrología desde lo más básico formando parte Espacio Cósmico.

bottom of page